En primera instancia, se deberán utilizar los proyectiles de las características especificados para cada chaleco. Es aconsejable efectuar el número suficiente de disparos, para tener una seguridad razonable, de que el primer tiro de ensayo disparado al chaleco, impacte en el chaleco a una velocidad que no exceda la mínima requerida en más de 15 m/s (50 pies/seg.).
La mayoría de los países que poseen normas de resistencia balística relacionadas con los chalecos antibalas y elementos balísticos, denominan los diferentes niveles de protección basado en los calibres de los proyectiles.
Se ha hablado tanto del chaleco balístico que a menudo se generaliza en su género para su utilidad, y es que es importante resaltar que lo que es seguro para los hombres no lo es necesariamente para las mujeres.
Los chalecos balísticos poseen una resistencia conforme, por lo regular, se estima que su tiempo de garantía oscila, normalmente, entre los 5 y 10 años, no obstante, habría que tener en cuenta que, en lo referente al cuidado que se debe tener sobre este, resultaría propicio aclarar que esta misma duración dependería también del tiempo de uso que se requiera, pues no valdría la resistencia de un chaleco que se usa todos los días a la de uno que solo se equipa con regularidad.
Los oficiales que acaban de recibir sus chalecos nuevos que cumplen con el estándar NIJ 0101.06, por lo general, no sabes que hacer con sus prendas tácticas viejas. Bueno, hoy les contaremos ese paso a seguir.
Retomando el artículo anterior, hoy continuaremos con la segunda parte de nuestras recomendaciones: Qué hacer y qué no en el cuidado de armaduras corporales. ¡Echa un vistazo!
Cuidar la armadura corporal o las prendas tácticas, resulta ser una tarea sencilla si se tienen en cuenta las recomendaciones que tenemos hoy para ti.
Por ejemplo ¿sabías que la humedad puede afectar negativamente el rendimiento de la armadura corporal? Lo más importante es consultar las instrucciones del fabricante para conocer las formas de cuidado y manipulación adecuadas. A continuación, te contamos algunos consejos rápidos para comenzar.
¿Qué hacer y qué no?
CUIDADOS
– Qué hacer: Sigue las instrucciones de cuidado recomendadas por el fabricante. Todos los modelos de chalecos antibalas que cumplen con el estándar NIJ-0101.06 deben tener las instrucciones de cuidado recomendadas por el fabricante en la etiqueta.
– Qué hacer: Asegúrate de que cualquier otra persona, como un miembro de la familia o un compañero de trabajo, que se preocupe por la armadura también conozca estas instrucciones.
INSPECCIÓN
– Qué hacer: Inspecciona visualmente las cubiertas de los paneles balísticos con frecuencia. Comprueba si hay cortes, roturas, separación de costuras, problemas de sellado y tela desgastada o deshilachada debido a un desgaste excesivo.
– Qué no hacer: No abras las cubiertas de los paneles de blindaje por cualquier motivo. Si la integridad de la cubierta del panel se ve comprometida de alguna manera, comunícate con el representante de tu agencia de inmediato.
– Qué hacer: Inspecciona visualmente las placas de blindaje duro antes de cada uso para asegurarse de que no haya grietas en la superficie u otros signos de daño; el daño a una placa es un indicador claro de que el panel o placa de blindaje debe reemplazarse.
– Qué no hacer: No asumas que una apariencia de buen estado implica un buen desempeño.
– Qué hacer: Inspecciona con frecuencia el estado de la etiqueta en el panel de blindaje. Al recibir un chaleco protector nuevo, copia la información incluida en la etiqueta del producto y consérvala en un lugar seguro. Se recomienda encarecidamente que cada agencia de aplicación de la ley mantenga un inventario de la información del chaleco para todos los oficiales, lo más importante la información incluida en las etiquetas de los fabricantes.
– Qué no hacer: No uses un chaleco con una etiqueta ilegible. Comunícate con el fabricante para reemplazar la etiqueta. Conserva una etiqueta gastada o ilegible. Identificar el modelo es importante en caso de un retiro de seguridad.
– Qué hacer: Ten en cuenta la fecha de vencimiento de la garantía del producto del fabricante y trabaja con el representante de tu agencia para asegurarte de que el chaleco se reemplace de manera oportuna. Si la armadura supera el período de garantía declarado, infórmalo al representante de tu agencia.
– Qué no hacer: No Retires de servicio la armadura útil hasta que la armadura de reemplazo esté disponible para su uso inmediato. Un oficial sin armadura corre mayor riesgo que un oficial con armadura vieja o desgastada / dañada.
– Qué hacer: Notifica al representante de tu agencia sobre cualquier panel de blindaje o etiqueta que muestre daños o desgaste excesivo.
– Qué no hacer: No intentes reparar los paneles de blindaje bajo cualquier circunstancia. Informa los daños al representante de tu agencia.
MANEJO
– Qué hacer: Asegúrate de que los paneles de blindaje encajen correctamente en los soportes con la cara de impacto y la cara de desgaste orientada correctamente. Consulta la etiqueta del panel balístico, que indica si el lado etiquetado es la cara de impacto o la cara de desgaste.
– Qué no hacer: No flexiones, dobles, comprimas o pliegues innecesariamente los paneles de blindaje suave cuando los manipules. Esto puede contribuir a la degradación de los materiales balísticos con el tiempo.
– Qué hacer: Manipula las placas de blindaje duras, especialmente las que incorporan materiales cerámicos, con cuidado porque pueden ser frágiles.
– Qué no hacer: No dejes caer placas de materiales cerámicos sobre superficies duras, ya que esto puede causar roturas o grietas que pueden tener un efecto adverso en el rendimiento.
Durante la década de 1960, E.E.U.U fue testigo de un aumento dramático en las muertes de agentes del orden. De 1966 a 1971, el número de oficiales asesinados cada año en el cumplimiento del deber aumentó a más del doble, de 57 a 129.
Seguramente alguna vez te has preguntado, ¿Cuánta seguridad ofrecen los chalecos antibalas? De ser así, también es probable que te preguntes cuántos disparos resisten. Y para responder, debemos acudir a las tablas balísticas. ¿De qué se trata esto?
Los chalecos antibalas son una de las prendas tácticas que más demanda tienen gracias a su efectividad y la protección que proporcionan. Pero, ¿Qué tanto sabes sobre su fabricación y materiales de elaboración?